La Página/Redacción
Morelia, Michoacán.-Ante los enfrentamientos registrados en las inmediaciones del Congreso del Estado por parte de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) por la inminente aprobación de la nueva Ley de Educación, el Partido Acción Nacional (PAN), en voz de su presidente Miguel Ángel Chávez Zavala, hizo un llamado a retomar en Michoacán la agenda educativa y a la construcción de un acuerdo por la educación con una alta participación de los padres de familia y organizaciones de la sociedad civil.
Ya que “la sociedad michoacana no quiere ni puede seguir permitiendo el debilitamiento de las instituciones generado por minorías que a través de la violencia, la presión, el chantaje y el desorden social quieran imponer sus mezquinos intereses”, el líder panista además exhortó al Ejecutivo federal a que asuma el control de la educación en Michoacán como lo hizo en materia de seguridad.
“Urge que en el marco de la Estrategia por la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, la Federación asuma la rectoría de la educación ante la omisión del Gobierno del Estado, pues sólo así se romperán redes de corrupción y de complicidad que existen entre autoridades estatales y las organizaciones sindicales, y se podrá poner freno al boicot del magisterio a las reformas estructurales, pues no tienen ningún derecho a ello y mucho menos a secuestrar la educación de los niños y jóvenes”.
Asimismo, frente a los intentos de presión del magisterio michoacano con la radicalización de sus acciones en torno a la Reforma Educativa, Chávez Zavala refrendó el respaldo de Acción Nacional al presidente de la Mesa Directiva del Palacio Legislativo, Alfonso Martínez Alcázar, y a su grupo parlamentario, “en las responsables decisiones, que conforme a la ley y los procedimientos legislativos se tomen en el Congreso del Estado”.
Finalmente, el jefe del panismo michoacano puntualizó que este momento de crispación y hartazgo social no debe rebasar a las instituciones, en donde “estamos a tiempo para evitar que padres de familia y la sociedad civil asuman la defensa de la educación de sus hijos de manera violenta”.