La Página
Por ANA MARÍA CANO
Morelia, Mich; 8 de mayo del 2022.-Autoridades universitarias, de gobierno municipal y estatal, presenciaron el acto conmemorativo del 269 de Aniversario del natalicio de Don Miguel Hidalgo y Costilla.
El rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), Raúl Cárdenas Navarro, quien dirigió el mensaje oficial, enalteció la vida y obra del Padre de la Patria, Miguel Hidalgo y Costilla.
“Este es un día especial para todos donde recordamos el natalacio del Padre de la Patria, desde 1765 año en el que Hidalgo llegó a Valladolid a la edad de doce años acompañado de su hermano a iniciar estudios en el Colegio de San Nicolás Obispo, y a partir de entonces, Hidalgo pasaría casi 26 años en esta ciudad en el Colegio fundado por Vasco de Quiroga”.
En su mensaje, el rector nicolaita señaló que en las aulas de San Nicolás y en las calles de la ciudad, Hidalgo fue formando su carácter, su talento y personalidad.
“Fue un hombre de ideas avanzadas, de letras, traductor de teatro clásico francés, un filósofo aliado, un conversador, un estudioso lleno de intelectualidad, esto, fue gracias a su paso por el Colegio y por Valladolid”.
Destacó la vida y obra de los más grandes nicolaitas como Miguel Hidalgo, quien después de concluir sus estudios colegiales y estudios mayores en Biología en la Ciudad de México, donde obtuvo grados, Hidalgo se incorporó como maestro del Colegio en 1777 y al año siguiente se ordenó como sacerdote.
Fue catedrático de Latín, Lógica, Filosofía, Física, Matemáticas y Biología, Hidalgo fue vice rector de San Nicolás, en 1784 recibió un importante reconocimiento por su cátedra.
“Pérez Tala, en carta dirigida a Hidalgo, le decían que era un joven que llegará a ser luz puesta en el candelero. Hidalgo de apenas 31 años, se habia consolidado como catedrático y contribuido a la formación de mchos colegiales. Hidalgo no dejó de cultivarse, se entregaba a su formación como biológo, a la lectura y música que era una de su pasiones”.
Al mismo tiempo estrechaba sus lazos con la sociedad pues su papel de sacerdote lo facultaba para ministrar sacramentos y muchas familias lo buscaban para celebrar misas y bautizar.
Su responsabilidad al frente del Colegio como vice rector, tesorero y sobre todo como rector, las complejas realidades le abrieron los ojos y terminaron por forjar su carácter y lo hicieron más sensible en las terribles condiciones en las que vivían indios, castas y mestizos.
“Es verdad que a Hidalgo se le recuerda por ser el iniciador de una insurrección que dio al orden colonial e hizo posible la construcción de una nueva nación libre, independiente y soberana que vio la luz en 1821. Todos conocemos ese pasaje de la hitoria en el que Hidalgo en la madruga del 16 de septiembre de 1810 tomó la decisión de revelarse, se referían a ella como un repentino acto de libertad”.
Señaló la importancia de aquella madrugada en la casa del cura donde se liberó sobre el camino a tomar una vez descubierta la conspiración en Querétaro, que de pronto y ante el asombro de todos, Hidalgo cortó de tajo la discución y exclamó aquella famosas palabras -caballeros aquí no hay más recurso que ir a tomar gachupines- y en efecto, en el juicio que se le siguió cuando fue tomado preso en 1811 el propio Hidalgo se refirió a esa acción revolucionaria como un frenesí.
“Pero ese líder rebelde era también un sabio frustrado, y recordamos entonces que Hidalgo no es solo entonces el insurgente que conocemos, sino también el maestro que fue el mejor biológo. Hidalgo arrastró a muchos seguidores pero también tenía a su alrededor a importantes militares, abogados y eclesiasticos que con sus ideas convirtieron una rebelión que nació entre la incertidumbre”.
Dicha rebelión, dijo, llegó a ser un movimiento armado y popular cuya intención era tranformar ideas políticas, no solo una revuelta violenta, se le debe en gran medida a Hidalgo y sus colaboradores quienes realizaron esfuerzos para establecer un gobierno propio vincular la insurrecion y diseñar una Constitución.
“Hidalgo es ejemplo de sus conocimientos, la experiencia de su sacerdocio donde parece decirnos que transformemos al mundo, pero que lo hagamos con inteligencia, con la información y conocimiento riguroso de la realidad”.
Al término del evento se hizo el acto de la Ofrenda Floral y guardia de honor por parte de todos los presentes.