La Página
Morelia, Michoacán.-Bastaron 25 votos a favor, y 11 en contra de los diputados de la 75 Legislatura, para destituir a Miguel Ángel Aguirre Avellaneda como titular de la Auditoría Superior de Michoacán, espacio desde el cual presuntamente cometió actos de corrupción, además de ejercicio indebido de atribuciones.
Además, en la sesión del Congreso del Estado, se acordó de inmediato emitir la convocatoria para ocupar este espacio, mismo que ocupó a quien han tildado como el “fiscal carnal”, por haber sido impuesto (mediante gestión con diputados) por Silvano Aureoles Conejo.
Y es que Aguirre Avellaneda también fue auditor municipal en Zitácuaro y delegado administrativo de la Secretaría de Finanzas y Administración, en periodos en que Aureoles Conejo fue presidente municipal y gobernador de Michoacán, respectivamente.
Este acto de remoción estuvo aderezado en los últimos meses por una serie de descalificaciones, declaraciones, acciones, denuncias, y traiciones entre simpatizantes y beneficiados por Silvano Aureoles contra morenistas.
Incluyendo, una denuncia que interpuso la diputada Seyra Anahy Alemán Sierra en contra del auditor y de la legisladora priísta Guillermina Río Torres, por supuesto abuso de autoridad y ejercicio ilícito de servicios públicos, ante la Fiscalía Especializada en Combate contra la Corrupción, cuyo titular curiosamente también fue un cargo que impuso el perredista Silvano Aureoles.
Miguel Ángel Aguirre Avellaneda habrá de recurrir, por derecho, a su defensa jurídica, pues lo respalda la presunción de inocencia. Con ello iniciará la guerra jurídica contra la 75 Legislatura del Congreso del Estado. En tanto que la legislatura podría enfrentar un desacato al no hacer caso a un supuesto amparo que llegó antes de que iniciara la sesión, mismo que ponía freno al desarrollo de la misma.
Mientras que en el aspecto mediático la guerra de declaraciones y opiniones habrá de darse entre los “silvanistas” y los medios de comunicación a su servicio, y los morenistas, con las mismas armas.
