Redacción/La Página.
Morelia, Michoacán.-En sesión extraordinaria, integrantes del Consejo Universitario acordaron que atenderán en pleno a una comisión del grupo de rechazados, pero con la estricta condición de que primero liberen las instalaciones universitarias, para lo cual se fijó como plazo el próximo jueves, en que sesionarán de nueva cuenta y determinarán las medidas a seguir en caso de que los jóvenes persistan en su actitud.
La reunión finalmente pudo llevarse a cabo en el auditorio del Centro de Investigación y Desarrollo del estado de Michoacán (CIDEM), luego de que integrantes del Sindicato de Empleados (SUEUM), impidiera que la sesión se efectuara en las instalaciones del Sindicato de Profesores (SPUM), como inicialmente se tenía previsto.
De esa forma, gran parte de los consejeros profesores, alumnos directores, y representantes de la comunidad nicolaita realizaron un minucioso análisis de la situación que prevalece en la Máxima Casa de Estudios de Michoacán, y se determinó darles oportunidad al grupo de rechazados para que hagan su solicitud formal al Consejo Universitario siempre y cuando liberen las instalaciones, y poder reanudar las actividades académicas detenidas desde hace casi una semana.
En el marco de la reunión, varios directores como de Psicología, Enfermería y Salud Pública entre otros, señalaron que en reuniones con integrantes de la Coordinadora de Universitarios en Lucha (CUL), previo a la toma, les hicieron saber las limitaciones que existen para admitir más alumnos de los que la capacidad en infraestructura y recursos humanos les permite; asimismo, otros como el de Facultad de Ingeniería Mecánica, explicaron que han ofrecido lugares en sus dependencias a los rechazados, pero ninguno se ha presentado.
Ante esta situación, el presidente del Consejo Universitario, y rector de la Universidad Michoacana, Salvador Jara Guerrero, hizo un llamado para que los jóvenes que fueron rechazados se acerquen con los directores de las facultades, de preferencia acompañados por su madre y padre, y se cercioren de forma directa si es posible que puedan ser admitidos.
Por su parte, los consejeros alumnos de varias facultades coincidieron en señalar que para ellos lo más importante es que se respete el derecho que tienen a recibir una educación de calidad, por lo cual, con el apoyo de su familia se esfuerzan cada día, de tal manera que exhortaron a los jóvenes que mantienen la toma a buscar mecanismos de diálogo que no afecte el derecho que asiste a los más de 50 mil estudiantes inscritos a tomar sus clases.
De igual forma, integrantes del Consejo Universitario señalaron que es importante considerar que es el gobierno estatal y federal en quien recae una gran parte de la responsabilidad de brindar educación a la población, tarea que atiende la Universidad Michoacana a pesar de las limitaciones económicas que prevalecen.
Determinaron que lo más importante en la votación de cualquier propuesta que lleve a una solución de este conflicto, es considerar que sean decisiones que representen beneficio para la Casa de Hidalgo.