La Página
Por ANA MARÍA CANO
Con la frase: “Somos más los buenos”, el proyecto “Barriguita llena y Corazón contento”, busca dar atención al sector más desprotegido de Michoacán y evitar que proliferen patrones negativos en los menores.
Héctor Ayala Morales, representante de la Fundación “Educación para la Vida”, platicó de este proyecto “Barriguita llena y Corazón contento” en el programa “Conexión” que conduce el periodista Víctor Armando López Landeros.
El programa busca combatir la desnutrición, por lo que exhorta a la ciudadanía a sumarse con su apoyo, una vez que: “Hay más gente buena que mala”.
Educación para la Vida, es una fundación joven que nació en enero de 2023, y donde se encontraron con una realidad triste, que es el hambre, la falta de alimentación. Su primera meta, es atender a mil niños desnutridos.
Cuando hay hambre, dice, las palabras no entran, el aprendizaje es difícil, y ahí, empezaron con la inquietud de echar a andar el programa “Barriguita llena y Corazón contento”, donde esperan se sumen más aliados que aporten su ayuda.
“Vamos a buscar alianza con los más desprotegidos y ayudarlos para que tengan una esperanza en la formación, no sólo académica, sino que tengan herramientas para una mejor convivencia, dentro de casa y la escuela”.
Necesitan aliados, por eso se pueden sumar quienes deseen que los niños tengan alimentos, pues muchos hoy día tienen una alimentación carente de nutrientes, por lo que podrían tener problemas en su vida adulta.
Nos enfocamos, prosiguió, en el tema de la nutrición, más que la alimentación, buscamos abatir la desnutrición infantil, que es el objetivo de nuestra Fundación así como complementarlos con formación emocional para que tengan el corazón contento los niños.
Iniciaron este programa en la población de Yurécuaro, Michoacán, con alimentación para los hijos de los jornaleros agrícolas, donde después de algunos estudios, se encontró que estos infantes estaban desnutridos. Próximamente visitarán las poblaciones donde existan más jornaleros.
“También encontramos que son víctimas de abusos tanto físicos como de otra naturaleza, pero la Fundación ya está trabajando para darles un granito de esperanza”.
Por lo que durante tres meses realizan visitas a ese mismo lugar y trabajan para seguirles dotando el alimento y revisar si ha disminuido su desnutrición al mismo tiempo que trabajan el tema de su salud mental.
Este programa, resaltó Héctor Ayala, es ambicioso y busca abarcar otros núcleos de población de niños desnutridos a parte de los jornaleros agrícolas, por lo que invitó a la gente a que se sume a apoyar con un kilo de ayuda, y una empresa les da otro kilo de ayuda.
Dijo que esta fundación está llena de perfiles, no solo profesionistas, sino también de grandes seres humanos quienes brindan su tiempo y conocimientos de manera desinteresada en apoyo de niños con problemas.
“Decidimos hacer algo por la niñez más desprotegida, que tienen más problemas emocionales, y el objetivo de la fundación es evitar que se sigan proliferando patrones negativos de comportamiento, de problemas emocionales en casa. Vamos a trabajar en varios municipios con los niños más desprotegidos”.
El representante de la fundación señala que fue un grupo de profesionistas el que se decidió a hacer equipo, reunirse y compartir su profesión con mucho cariño de manera voluntaria para ayudar a quienes tienen estos problemas.
La fundación “Educación para la Vida” cuenta con doctores, psicólogos, tanatólogos quienes brindan su tiempo apoyando dando terapias, por lo que pronto tendrán una alianza con el Colegio de Psicólogos de Michoacán.
“Tenemos voluntariado en temas de salud mental, porque es muy importante que la niñez más desprotegida sepa que no está condenada a vivir en un círculo de problemas, pobreza y marginación, sino que es posible que pueden salir de ello, por lo que es importante evitar que repitan patrones de comportamiento en su vida”.
Ayala Morales dijo que muchos niños piensan que si fueron maltratados, tienen que seguir la violencia, que si vivieron en la pobreza y la marginación, son factores que están bien.
Por lo anterior, decidieron conformar esta fundación, con la cual han recorrido varias escuelas en Morelia y el interior del estado, visitas en las cuales se dieron cuenta que el hambre prolifera en varias familias.
Héctor Ayala Morales dice ser un amigo de los michoacanos, fue secretario de Educación en Michoacán, trabajó en una instancia federal en la Secretaría de la Defensa Nacional.
Se define como un hombre positivo que busca el beneficio común, por lo que invitó a los michoacanos a sumarse a las actividades que hace la Fundación para la Vida.
Comparte que después de terminar su administración como secretario de Educación del Estado, lo invitan a participar en actividades educativas en Jalisco.
De poder abrir alguna puerta para Michoacán, dice que abriría las puertas del corazón para lograr apoyar a más niños y llevar un mensaje de alegría, felicidad y sobre todo de esperanza.
