La Página
Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- Con un rotundo mensaje, “a Hipólito lo dejaron solo”, gente cercana al ex líder de las Autodefensas que fuera asesinado el pasado 29 de junio, en La Ruana, tuvo un primer y último acercamiento con los medios de comunicación. La familia de quien fue el candidato a la gubernatura de Michoacán por el PES corre peligro en el funeral, resaltaron las personas, hoy, Tierra Caliente quedó fuera del interés del Gobierno.
En un café ubicado en el Centro Histórico de Morelia, el cual frecuentaba Hipólito Mora y donde se sentaba a conversar con todo aquel que pasara y se le acercara, David Ceballos leyó la última palabra que tenía el ex líder de las Autodefensas a los medios de comunicación, el cual se concretó después de su segundo atentado, en marzo pasado.
“Que mi muerte no sea en vano.
Lo dije en muchas ocasiones, sabía que este día llegaría, lo dije, me voy a morir peleando, solo quiero que mi muerte no sea en vano.
Que los michoacanos, que todos presumimos bravura, seamos valientes una vez y acabemos con este mal que nos tiene en el suelo, que los policías vean que tienen la fuerza para acabar con esto, que el Gobierno, el que esté al momento de mi muerte, se fije en los ciudadanos antes que en sus campañas o en sus bolsillos.
Yo nunca acepté sobornos ni intimidaciones, luché sin recibir nada a cambio, más que el cariño dela gente, los que no me querían eran los chicos malos, yo ya estaré con mi hijo Manolo y le diré a la muerte “donde estabas, por qué me huías tanto”.
Que mi muerte no sea en vano y tanto mi familia, como mis amigos y mis fieles seguidores hagan lo que tengan que hacer para que la lucha que yo empecé siga siendo por una causa justa para los ciudadanos.
Aquí, y en el otro mundo, soy y seguiré siendo Hipólito Mora.
Don Hipólito vivió sus últimos años llamando al pueblo a ser conscientes de como estábamos, ya no llamó a las armas, buscó con política y trabajo sacar adelante al estado, se los dejo a casa uno que interpreten como vivió sus últimos años, cómo fue su lucha, él quería paz”.
David Ceballos enfatizó que después del último atentado, en marzo pasado, hubo más tensión en Felipe Carrillo Puerto, municipio de Buenavista, pero que Hipólito Mora no dejó solo a su pueblo, a quien quedaba de su familia en el lugar, a su huerta.
“Nos preparó y preparó a sus escoltas, decía que solo iban por él, pero se fueron muchos con él. Todo lo que sabemos es a través de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la Fiscalía General del Estado (FGE) no nos ha dicho nada. Hipólito falleció previo a caer de la camioneta y quemarse”, resaltó.
Con más de 10 denuncias interpuestas ante la procuración de justicia, desde hace tres años a la fecha, especificó que la familia pidió reservarse toda comunicación, pero hoy es el temor que sigue por el miedo de que puedan atentar contra ellos durante el funeral.
Y es que recordó que la mayoría de la familia del “héroe de La Ruana” vive fuera del país, pero quienes están en la localidad, seguirán y no están garantizadas las medidas de seguridad.
El periodista Sergio Cortés destacó que Hipólito Mora era una persona que sabía que “lo iban a matar”, por lo que consideró que Michoacán es un estado que no tiene las condiciones para transitar libremente y se trata de un estado fallido.
En tanto, Javier Bravo, refirió que tras los dos atentados que tuvo en noviembre y marzo pasado, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional lo cuidaron en un inicio y, de la noche a la mañana, Hipólito Mora quedó con la escolta de la Guardia Civil, seis elementos; tres fueron asesinados con la autodefensa.
“Ya sabían que esto estaba caliente. Había una unidad del Ejército, de la Marina y de la Guardia Nacional y, en el momento de los hechos, nadie se acercó hasta 90 minutos después. Quien lo atacaba no era con abrazos. El recibió los balazos”, dijo.