Por ANA MARÍA CANO
Morelia, Michoacán.- Pese a advertencias de que el Consejo Supremo Indígena buscará retirar el “Monumento a Los Constructores”, conjunto escultórico ubicado en el Acueducto de Morelia, las voces para que no sea así se hacen escuchar.
Tal es el caso de la Academia Nacional de Historia y Geografía, quien en su calidad de vicepresidente de la misma, Adrián Iturbide Mejía, se pronunció en contra de la remoción de la escultura.
Esto ya que mañana primero de agosto se realizará una consulta ciudadana sobre la remoción de la escultura.
“En seguimiento a diversos oficios de fechas 9 de febrero del año en curso y 9 de noviembre del año 2020, y ejerciendo nuestro derecho humano a participar en la vida cultural y en relación sobre una Consulta Ciudadana y posible Remoción del Monumento dedicado a los Constructores de nuestra Histórica Ciudad, que según se realizara este próximo primero de agosto, nos pronunciamos una vez más en contra de que sea removido ese significativo Monumento, toda vez que es reflejo de la historia de nuestra comunidad”.
Lo anterior versa en un oficio mandado al presidente municipal Humberto Arróniz Reyes, el día de ayer, por parte de la Academia Nacional de Historia y Geografía.
En dicho oficio cita los oficios enviados anteriormente al Ayuntamiento donde señala que la placa que lo acompaña colocada el 11 de mayo de 1995 con la aprobación de la ciudadanía deja muy clara la intención con que se hizo A los constructores de la ciudad.
“Los habitantes de la ciudad de Morelia erigen, llenos de gratitud y orgullo, este monumento dedicado a la memoria de los constructores de Guayangareo-Valladolid-Morelia. Monumental y hermosa urbe, urdimbre de piedra y cultura que hemos heredado”.
Respecto de la ubicación la placa dice El lugar que ocupa el monumento fue elegido por ser un punto de la ciudad donde se integran dos puntos del desarrollo de la misma.
“No podemos permitir que se prive a la ciudad de un monumento que recuerda el hito histórico, de una momento en que se vivía una crisis por las sequías que desencadenaron pobreza y hambre, y que fue gracias al Obispo fray Antonio de San Miguel quien aportó recursos propios para construir el acueducto que representó trabajo para aquellos que no lo tenían ante la debilidad de la autoridad para enfrentar la crisis”.
Argumenta que no fueron dádivas, fue trabajo remunerado, como sucede actualmente. No fue trabajo esclavo. Están también representados el alarife, arquitecto o ingeniero constructor que dirige la obra; el maestro cantero, quién traza la estereotomía para el adecuado corte del materia que es la cantera; por último el trabajador que aporta la mano de obra.
Por supuesto que rechazamos la esclavitud, dicta el oficio, la explotación y posibles abusos que hubiesen existido en cualquier época.
“Sin embargo, este monumento es un reconocimiento a aquellos que hicieron posible la edificación de esta ciudad que hoy nos llena de orgullo, la historia vivida debe ser recordada para seguir adelante como ciudad, municipio, Estado y Nación. El monumento no necesita una consulta ciudadana para continuar donde está, ocupa el lugar por derecho propio, forma parte de la Memoria Histórica de la ciudad y no debe ser utilizado como pretexto para generar violencia, basta de permitir que grupos cualesquiera que sean sus ideas provoquen destrucción y agredan con toda impunidad”.
Argumenta que como autoridades municipales tienen el apoyo ciudadano para imponer la ley con fundamento jurídico nacional en diversos artículos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticos e Históricos, entre otros que menciona.
Así mismo con fundamento jurídico Internacional soportado por el artículo 15 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; y al artículo 1o de la Carta Internacional sobre la Conservación y la Restauración de Monumentos y Sitios (Carta De Venecia 1964).
“Este dice que la noción de monumento histórico comprende la creación arquitectónica aislada así como el conjunto urbano o rural que da testimonio de una civilización particular, de una evolución significativa, o de un acontecimiento histórico. Se refiere no sólo a las grandes creaciones sino también a las obras modestas que han adquirido con el tiempo una significación cultural”.
Por todo lo anterior pidió al Ayuntamiento nuevamente conservar el Monumento referido en el lugar donde ha estado y ahora se encuentra, y protegerlo de cualquier daño o deterioro.