Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- Los homicidios que se están registrando en Michoacán son por ajustes de cuentas entre los grupos delincuenciales, enfatizó el secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña, al precisar que tras los hechos en Marcos Castellanos y Zinapécuaro prende focos a las autoridades de Gobierno que deben atenderse de manera puntual.
En entrevista, el encargado de la Política Interna de Michoacán aseguró que el crimen organizado no ha rebasado la gobernabilidad de la entidad, por lo que indicó que hoy hay una estrategia de seguridad coordinada con los estados y que las agresiones que se presentan día con día son por “ajustes de cuentas entre ellos”.
Si bien consideró como lamentable la situación que se vive en Michoacán, especificó que poco a poco se ha ido atendiendo la situación de inseguridad y violencia.
Indicó que simplemente en la región de Tierra Caliente se logró la liberación de las carreteras, por lo que hoy hay libre tránsito.
Sin embargo, los acontecimientos suscitados en San José de Gracias, municipio de Marcos Castellanos, con el hallazgos de al menos 11 perfiles genéticos, pese a que no se han encontrado los cuerpos, y los hechos registrados en el palenque de gallos en Zinapécuaro, dan un contexto diferente por la diferencia en que se registraron, evidenciando que la situación de violencia no solo está en Tierra Caliente, sino que se expande por todo el estado.
Al igual con los asesinatos de los presidentes municipales de Contepec y Aguililla que se dieron con diferencia de poco más de un mes y las declaraciones del gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, sobre que la región de Zamora es la más violencia del estado, inclusive que en Tierra Caliente por la incidencia delictiva que registra.
A lo que Torres Piña comentó que es un tema que se está atendiendo, más cuando la violencia se arrastra de administraciones anteriores.
