Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- Sin seguridad, sin ley… se encuentran los municipios de Buenavista y Aguililla. La historia se repite todos los días, ausencia por parte de las autoridades de los Gobiernos Federal y Estatal, mientras que Los Viagras y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) siguen avanzando en su guerra por apoderarse del territorio.
Ciudadanos están levantando la voz y aseguran que a la altura de División del Norte, rumbo a El Terrero, ambos en el municipio de Buenavista, hay una “aduana” por parte de Los Viagras y bloquean el paso dejando pasar solo a unos cuantos carros.
Muchos se cuestionan, – si para el Gobierno Federal esto es paz, ¿la guerra qué será?
Y es que tanto en Buenavista, como en Aguililla, no hay orden, no hay paz, no hay garantías para que la población siga viviendo en la zona.
En Aguililla, denunciaron que se trata de un pueblo fantasma y que los que se quedan corren el riesgo de ser levantados, a plena luz del día. Agresiones directas, quema de casas, amenazas… son el vivir diario, dicen al asegurar que buscan refugio ante la situación que se vive.
“¿Se puede vivir así?, ¿se puede fingir que no pasa nada? Agachamos la cabeza para que la guillotina no caiga sobre nosotros y lo peor, por qué hablar, hablar, hablar, que de poco nos ha servido”, se cuestionan la población de la zona.
Los cortes a la carretera Apatzingán-Aguililla continúan, principalmente a la altura de El Terrero. Los Viagras cuidan que no pasen el Cártel Jalisco Nueva Generación; un monstruo vigila la carretera.