Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- El Comité de Participación Ciudadana (CPC) Michoacán ya no tiene injerencia en el caso Odebrecht, toda vez que la Fiscalía General de la República (FGR) atrajo el tema y únicamente la Fiscalía Estatal Anticorrupción tendrá que proporcionar la investigación correspondiente, indicó la presidenta, Elizabeth Vázquez Bernal.
En conferencia de prensa, dijo desconocer las obras que se encuentren en esta situación y las hojas que contenga la carpeta de investigación, pero indicó que es un tema que debe atenderse por los hallazgos y observaciones detectadas en materia de corrupción.
“Nuestra función no está la denuncia como una función esencial y, a partir del fallo del Juzgado de Distrito, se reconoció al CPCP como un afectado directo. Hoy, el tema lo atrajo la FGR, quien está requiriendo información a la Fiscalía General del Estado (FGR)”, agregó.
Es de mencionar que parte de las investigaciones que se han hecho, en el transcurso de los años, se ha conocido de sobornos millonarios que pagó la empresa Odebrecht en todo el mundo, inclusive en Michoacán con la construcción de la Presa Francisco J. Múgica.
La Auditoría Superior de Michoacán (ASM) ha dado a conocer que hay observaciones sobre recursos no aclarados en la construcción de la presa por el gobierno de Michoacán en las administraciones de los entonces perredistas Lázaro Cárdenas Batel (jefe de Asesores del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador) y Leonel Godoy Rangel (diputado federal por Morena), principalmente en la recaudación local.
Si bien se detectaron costos inflados sobre el transcurso de los cinco años que tardó en construirse la obra, también se detectaron contratos que no se apegaron a los lineamientos, pero que a estas irregularidades se les dio carpetazo, toda vez que los expedientes prescribieron, es necesario analizar detectado recientemente.
Y es que Quinto Elemento Lab reveló la existencia de una contabilidad alterna proveniente del Departamento de Operaciones Estructuradas, la cual se piensa se trata de una oficina secreta de la empresa brasileña y que distribuía “sobornos” a funcionarios de América Latina.
De aquí, en lo que se conoció como la “Caja 2” aparecieron códigos de personas vinculadas a una obra hidráulica en Michoacán, donde se identificaron a los alias de “Figo” y “Javier”, a quienes en el 2006 se les dio una cantidad de 4.2 millones de dólares, es decir, 2.1 millones de dólares a cada uno.
Además otros dos alias, “Manuel” y “Francisco”, a quienes no se les puso un monto fijo, pero que se encontraban en la lista de sobornos.
Asimismo, se tiene conocimiento, de acuerdo a Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad (MCCI), en junio de 2008 se detectó un presunto soborno por 50 mil dólares a quien fungía como responsable de la obra de la presa.
Cabe destacar que la obra, inicialmente, tenía un costo de mil 500 millones de pesos; al final ascendió a los 2 mil 915 millones de pesos. Fue en 2006 cuando se firmó el contrato con Odebrecht y la construcción inició en el 2007 a concluirse al año siguiente. Fue hasta 2013 que se entregó la obra.