La Página
Por ANA MARÍA CANO
Morelia, Mich; 16 de enero del 2023.-Después de dos años y cuatro meses del feminicidio de Jessica González Villaseñor, será el próximo 26 de enero, donde el juez Ariel Montoya Romero escuchará los alegatos finales de las partes de la víctima y del presunto feminicida para tomar una determinación y emitir su veredicto.
Los padres de Jessy manifestaron sentirse desilusionados y burlados en las audiencias que se han realizado a lo largo de este tiempo donde dicen solo han visto burlas de parte de los abogados defensores del imputado Diego Urik N., pero dicen, no quitarán el dedo del renglón para que llegue la justicia a la muerte de su hija y sea castigado el responsable, de quien dicen “no solo mató a mi hija, mató a todo la familia”.
El juez Montoya Romero dijo que al dar los alegatos finales, tendrá 24 horas después para dar a conocer su fallo y así saber si el hasta hoy imputado del crimen, Diego Urik, es declarado culpable o inocente de la muerte de quien fuera una joven maestra muerta por 31 golpes que recibió en su cuerpo de manera sádica un 21 de septiembre del 2020.
En la última audiencia realizada, el presunto feminicida, Diego Urik, se dijo ser inocente del crimen, y alegó en su defensa que a la hora de la desaparición de Jessica, él se encontraba en un motel con una mujer, por lo que no pudo ser él quien la matara, sin embargo, inculpó a su amiga Yahir, de estar a esa hora con la hoy occisa.
Por lo que en próximos días, el juez podría dictaminar la sentencia de 50 años de presión por el delito de feminicidio, o en su caso, determinar la inocencia de Diego Urik, y éste saldría libre inmediatamente después de estar en prisión preventiva por más de dos años.
Fueron más de 100 las pruebas y testimonios que se mostraron ante el juez en este juicio oral por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), donde los abogados defensores de Diego trataron de mil manera de quitarles valor y no fueran tomadas en cuenta como pruebas.
Entre las evidencias mostradas se tuvo el testimonio de los dos amigos de Diego, entre ellos Yahir, quienes dijeron haber sido testigos de ver el cuerpo de la joven sin vida en la cajuela de Diego y verlo cuando lo levantó con sus manos e irlo a tirar en una zona boscosa del fracciomiento Monarca, donde éste vive.
Otro más fue la evidencia de rastros genéticos de Diego encontrados en la ropa y cuerpo de Jessica, así como de ella en la ropa de Diego que usaron ese día de la desaparición y muerte de Jessy.
También se demostró que ese día ambos tuvieron llamadas telefónicas y el celular de Jessica tuvo la misma señal de trayecto que la de Diego el mismo día y a la misma hora.
De igual forma, la amiga íntima de Diego, Hanna, dijo haber acompañado a éste a tirar las pertenencias de Jessica por varias calles durante la media noche, así como llevó a lavar el carro de Diego por las manchas de lodo que no se le pudieron quitar al intentar lavarlo, un testimonio más que dio fue que el hacha encontrada en el carro de Diego, supuestamente sería utilizada para mutilar el cuerpo de Jessy, según lo que le dijo Yahir.
En la última audiencia, Diego, después de manifestarse inocente, pidió al juez Ariel Montoya, hiciera lo posible por buscar al culpable de la muerte de Jessica, ya que mientra el verdadero responsable estaba libre, él permanecía privado de su libertad y sufriendo maltratos y tortura. Ese mismo día, inculpó de la muerte de Jessi a Yahir al decir que éste se sentía atraído por Jessy, y que estaban saliendo.