La Página
Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Tzintzuntzan, Michoacán.- Con un reconocimiento a los brigadistas que durante la temporada incendios fueron quienes estuvieron en el combate para el rescate de los bosques, el Gobierno del Estado inició la temporada de reforestación. La meta para este 2023 es reforestar un millón 200 mil arbolitos.
En el Cerro Tariakeri, el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, anunció que para el año entrante se deberán reforestar 100 millones de arbolitos.
Y es que resaltó que el cambio climático ha llevado a diversas afectaciones y hoy, Michoacán es uno de los estados más afectados por la poca lluvia.
El tema científico y la pérdida del bosque, puntualizó, genera estragos ya en el Estado. Si bien se redujo 30 por ciento la pérdida de suelo por incendios forestales el año pasado y 10 por ciento este año.
El director de la Comisión Forestal de Michoacán (COFOM), Rosendo Antonio Caro Gómez, enfatizó que hoy inicia el plan de restauración y pidió a los presentes no solo tomarse la foto, sino realmente comprometerse con generar vida mediante la plantación de árboles, a fin de que el oxígeno siga y haya agua.
Resaltó que hoy el cambio climático es un realidad, lo que ha conllevado a modificar los calendarios. La temporada de incendios, dijo, fue mayor y las lluvias han tardado en llegar, hoy son esporádicas y poco a poco vienen más que ayudarán en la reforestación.
En el evento, se hizo entrega de reconocimientos a los más de 700 brigadistas, qué colaboraron en 43 municipios y 8 comunidades indígenas autónomas en el combate de incendios en selvas y bosques de Michoacán.
El titular de la Secretaría de Medio Ambiente (SEMA), Alejandro Méndez López, indicó que este año fueron casi 2 meses de incendios forestales, por lo que la atención de los brigadistas fue fundamental para su combate y hubiera menor afectación en los bosques.
Sin embargo, lamentó que el calentamiento global ya está aquí y ésta generación difícilmente podrá atenderlo. Por lo que indicó que hay medidas para mitigar el cambio climático, donde luchar por mantener los recursos hídricos es un paso para la reversión de los daños y así, hacer frente al cambio climático y “no dejar a nuestros hijos sin agua”.
