Redacción/La Página.
Morelia, Michoacán.-La Comisión estatal de Derechos Humanos (CEDH) consideró violatorio de las libertades y derechos fundamentales de los alumnos de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, por el grupo de personas que mantienen ocupadas las instalaciones universitarias y exhorta al Consejo Universitario, a que ponga fin a ese conflicto, presentando las denuncias correspondientes o las acciones legales necesarias.
El documento denominado “Pronunciamiento de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, con motivo de la toma de instalaciones y suspensión de actividades de la Universidad Michoacana, establece también que los procesos y requisitos de ingreso que determina la institución Nicolaita, de ninguna forma pueden considerarse discriminatorios. El texto fue dado a conocer por el rector Nicolaita Salvador Jara Guerrero en conferencia de prensa.
Acompañado por funcionarios y directores de escuelas facultades e institutos, leyó la recomendación, firmada por el presiente de la CEDH, José María Cázares Solórzano, que fue enviada a través de un documento dirigido al Dr. Egberto Bedolla Becerril en su carácter de Secretario del H. Consejo Universitario, y fue producto de las quejas que estudiantes, profesores e investigadores de la Casa de Hidalgo presentaron ante dicho organismo, a partir de la toma de instalaciones que se registra desde el pasado 4 de septiembre.
Señala que la CEDH “considera violatorio de las libertades y derechos fundamentales de los alumnos regularmente inscritos en el ciclo escolar que transcurre, el hecho de que se les prive del ejercicio de estos por grupos que dicen representar a personas que no fueron aceptadas, considerando que quienes no han sido aceptados es por no cumplir con los requisitos exigidos, que en ninguna forma se pueden considerar discriminatorios, pues el derecho a la educación solo deberá ser limitado a la capacidad de cada uno, lo que no hace obligatorio de institución alguna, aceptar como su integrante a quien no demuestre haber acreditado los procesos de selección establecidos”.
De igual forma, suscribe la CEDH, “Se exhorta al Consejo Universitario, como órgano máximo de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo que ponga fin a este conflicto, asegurando de forma irrestricta el acceso a todos sus edificios a quien así tenga derecho, presentando al caso las denuncias correspondientes o llevando a cabo las acciones legales que sean necesarias, permitiendo de manera paralela la solución al conflicto, al transparentar sus procesos de selección y buscar espacios de diálogo alternos, atendiendo al interés superior de los alumnos regulares y los trabajadores de esa misma casa de estudios.
En los considerandos del pronunciamiento, se mencionan como fundamentos lo establecido en el artículo 26 (sobre el derecho a la educación) de la Declaración Universal de los Derechos Humanos “La enseñanza superior debe hacerse igualmente accesible a todos, sobre la base de la capacidad de cada uno, por cuantos medios sean apropiados, y en particular por la implantación progresiva de la enseñanza gratuita”.
Asimismo, indica que el derecho a la investigación y a ser beneficiado del proceso científico se encuentra consagrado en el artículo 15 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, aprobado por la Organización de las Naciones Unidas.
Agrega que la Constitución Mexicana, en el artículo 3º fracción VII señala que la autonomía universitaria lo es para los efectos de los actos de gobierno y administración pero sin omitir los postulados rectores de la educación regidos por la propia norma fundamental.
Además, “la fracción VIII del artículo 2º de la Ley Orgánica de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo le otorga autonomía para fijar los requisitos de ingreso, promoción y permanencia de su personal académico, entre los que se entienden incluidos trabajadores, alumnos y maestros; estos requisitos no han sido objeto de controversia por lo que el respeto de los derechos humanos se refiere, por lo que no son indebidos o discriminatorios en perjuicio de algún individuo o grupo”.
Añade que el artículo 14 del Estatuto Universitario establece que la Universidad Michoacana dispondrá de subsidios de los gobiernos federal y estatal “sin que por ello se deba limitar la autonomía universitaria, en lo relativo, entre otros, a los planes y programas, incluido el ingreso de alumnos, siempre que en estos procesos sean respetados los derechos humanos, para lo cual este Organismo Público Autónomo estará atento y vigilante”.
El último de los considerandos asegura: “que la situación que priva actualmente en la UMSNH es claramente violatoria de los derechos humanos de sus estudiantes, profesores y personal administrativo y operativo, pues el resultado de las tomas de sus instalaciones resulta en el impedimento formal y material de disfrutar sus respectivos derechos a la educación, a la investigación, al trabajo digno, al salario justo, al libre tránsito por tratarse de edificios públicos a los que se debería tener acceso, y hasta el derecho a actividades culturales, este último en perjuicio de todo el Estado, no solo de los integrantes de la máxima casa de estudios.
En este mismo contexto, en la conferencia de prensa y a nombre de los directores, Fernando Villaseñor Gómez, miembro de la Comisión de Ingreso del Consejo Universitario, leyó un documento en el que se establece que resultan incomprensibles las movilizaciones de los jóvenes estudiantes, toda vez que la Casa de Hidalgo es de las pocas que reciben cada año a más del 90 por ciento de los jóvenes que hacen trámite para ingresar .
Precisaron que la UMSNH es la única universidad del país que sostiene a 35 albergues y da comida y alojamiento a más de 5 mil moradores, quienes además reciben una beca económica y la condonación de todos sus gastos universitarios.
Señalaron que el diálogo con este grupo de jóvenes que reúne a quienes no acreditaron el examen de ingreso y a quienes no realizaron los trámites en tiempo y forma inició desde hace meses para evitar que se `presentara esta situación, no obstante , el grupo de jóvenes decidió radicalizar sus acciones para que a través de la presión logren el ingreso de los alumnos que no cumplieron con los requisitos .
Destacaron que el Consejo Universitario ha seguido el procedimiento legal que corresponde en este caso, sin embargo pese a los exhortos, apercibimientos y amonestaciones persisten en su actitud de mantener cerrada la universidad.
Por último, manifestaron que ya es momento de terminar con estas prácticas de chantaje y presión, por lo que profesores alumnos y maestros se unieron para interponer sus quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos porque su derecho a recibir educación no ha sido respetado.