La Página
Por José Antonio Zamudio.
Morelia, Michoacán.-Bajo el completo desamparo y en un lugar desconocido para ellas, una mujer indígena y su hija invidente solicitan algunas monedas para poder comer.
En la esquina de Valladolid y Morelos sur permanecen madre e hija, la menor de nueve años invidente e inválida.
Con pocas palabras en su diálogo, la madre explica que es originaria del Estado de México y que lleva una semana en la ciudad de Morelia.
Sobre su hija, señaló que de nacimiento, no puede ver y que no tiene fuerzas en sus pequeñas piernas para moverse por sí sola.
Aún no acude a ninguna institución por temor a no ser atendida por venir de otro estado de la República.
Sentadas en la banqueta, a una cuadra del plantón de también otras personas, que no dejan de percibir un salario, la madre de la niña mantiene un vaso de plástico para recibir unas cuantas monedas.
Últimas cifras del INEGI, indican que la pobreza, en sus distintas modalidades, supera el 50 por ciento de la población en México.
