La Página/Redacción
Morelia, Michoacán.-Ante la llegada de la temporada de lluvias, tormentas y huracanes, y tras el anuncio de que solo ocho de 113 municipios cuentan con su Atlas de Riego, el senador Salvador Vega Casillas indicó que el estado de Michoacán nuevamente no se encuentra preparado para proteger a la ciudadanía, sus bienes materiales, así como la producción agrícola, que es actualmente la principal fuente de ingresos de miles de michoacanos.
“Otra vez estamos llegando a la temporada complicada para Michoacán y seguimos en las mismas condiciones, carentes de información que ayuden a contener un poco los desastres que suceden año con año con las lluvias y temporales que azotan al estado”.
Vega Casillas recordó que apenas en el mes de marzo se comenzó a pagar el Seguro Agrícola Catastrófico a los afectados del 2013, y que para ese mismo mes se hablaba de considerar un aumento del mismo por la cantidad de 180 millones de pesos.
Agregó que estas acciones y cantidades no son suficientes, pues son miles de michoacanos los que dependen y se sustentan de trabajar el campo, y que quedan desprotegidos tras los inevitables incidentes naturales, pues las autoridades no ponen atención en evitar que estos hechos se conviertan en tragedias.
“Los Atlas de Riesgo son muy importantes porque ayudan a evitar que los fenómenos climatológicos se transformen en verdaderas tragedias, donde existen pérdidas humanas, desaparecen ciudades y pueblos enteros, y nuestros productores pierden todas sus cosechas, su dinero y su tiempo invertido”.
El legislador panista puntualizó que si el gobierno del estado y los municipios no cumplen con las medidas enmarcadas para prevenir contingencias, se complica mucho más acceder a los recursos del Fondo Nacional para Desastres Naturales (FONDEN).
“Urge que seamos más organizados, que tengamos nuestros mapas listos y que con ello se comience un mejor desarrollo urbano del estado, de cada ciudad y población michoacana. Es por el bienestar de todos, el orden ayuda a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”.
Para finalizar Salvador Vega Casillas insistió en la necesidad de dar certeza a los ciudadanos de que el estado trabaja en cuidar su integridad física y patrimonial, y que por sobre cualquier fenómeno, se hace lo mayor posible para su protección, destinando los recursos a las áreas que así lo necesitan.