Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- La Fiesta Michoacana hizo retumbar el Teatro Mariano Matamoros el día de su inauguración y apertura. Viajar por cada uno de los rincones de Michoacán fue el principal objetivo del espectáculo que puso en marcha una obra que pasó por cuatro administraciones y seis gobernadores pero que hoy, es un sueño hecho realidad.
México y Michoacán viven tiempos de adversidad por la pandemia de COVID-19, pero apostar por el arte y la cultura es fundamental para que la sociedad se vuelva más pacífica y respetuosa. “Una luz de esperanza” en estos tiempos fue como lo consideró el gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo.
La Fiesta Michoacana se hizo presente en el nuevo espacio cultural; expresiones artísticas llegaron de la mano de sus cánticos, bailables y la música por un recorrido desde la Costa hasta el Oriente, sin dejar de lado la Tierra Caliente, la zona Purépecha, el Centro y cada uno de los rincones de Michoacán.
Su cultura diversa, muestra reconocida de talla internacional, permitió que los espectadores disfrutaran uno a uno los actos. La Danza de los Viejitos, la Danza de los Kúrpites, la Orquesta Tata Vasco y el Ballet Folclórico es parte de lo que se apreció en la inauguración y puesta en marcha del Teatro Matamoros.
Con trajes típicos, los bailarines y músicos también se hicieron presente. El zapateado en la tabla no falto, todas las atracciones que representan a Michoacán estuvieron presentes en el primer espectáculo que se presentó en el Teatro Mariano Matamoros, el cual está a la altura que algún otro espacio cultural del país y del mundo.
“Tener espacios adecuados para la libre expresión, para expresar la diversidad, esa diversidad que nos hace fuertes, aquí podrá suceder”, resaltó Aureoles Conejo al considerar que dentro esto quedará en la memoria histórica de Morelia y el estado.
Por lo que enfatizó que a un año de la pandemia, la inauguración y apertura del Teatro Mariano Matamoros significa “una luz de esperanza” ante toda la adversidad que se vive.