Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, se lavó las manos y no denunciará todas las acusaciones que vertió el pasado miércoles de que el crimen organizado metió las manos en el proceso electoral y que respalda no solo al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), sino también el triunfo que tuvo Alfredo Ramírez Bedolla.
“No me corresponde”, fue lo que contestó ante los cuestionamientos de los medios de comunicación al precisar que hay más de 90 denuncias por parte de otros actores, entre ellos partidos políticos que dijo, son los únicos que pueden hacer las denuncias correspondientes.
“Nos toca cuidar que la autoridad correspondiente actúe y lo tiene que hacer la Fiscalía y ahora el órgano electoral”, resaltó al precisar que todas las pruebas se están reuniendo por parte de quienes han interpuesto las denuncias y que él únicamente acudirá a la denuncia pública, la cual podría derivar en una investigación, en la cual dijo, “estoy dispuesto a dar declaración”.
Y es que enfatizó que el “el riesgo de que regrese Michoacán al pasado, es muy peligroso”, al referir diversos datos de la descomposición social en Michoacán, de 2006 al 2015, el mandatario estatal nuevamente echó culpas a Leonel Godoy Rangel y Jesús Reyna García, de quienes especificó son los que tienen supuestos nexos con el narco y quienes alentaron a diversos atentados y agresiones que pusieron en jaque la estabilidad y gobernabilidad de la entidad.
“¿Cómo pudo Michoacán mantenerse de pie varios años?”, fue el cuestionamiento del gobernador del estado al precisar que se debió al apoyo institucional del Ejército México y la Marina de México, quien hoy, dijo, desde el 1 de diciembre de 2018, no existe el apoyo con la política de “abrazos y no balazos, y pórtense bien porque sus mamás los va a regañar” por parte del Gobierno de México.
Con esto, enfatizó que el titular del Ejecutivo Federal, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, fue quien agradeció al crimen organizado por no afectar el proceso electoral. Sin embargo, dijo que si el tema sigue igual, en el 2024 será el narco quien imponga al mandatario federal.
Nuevamente tachó a Leonel Godoy Rangel y a Jesús Reyna García por sus supuestos nexos con el crimen organizado. Pero se negó a contestar si pidió el apoyo a este último a favor de Carlos Herrera Tello. “No hablaré del ex presidiario”, dijo.