Por DANIELA AYALA OCHOA*
Este 28 de noviembre no hay mucho que festejar, ni celebrar, en el Día Nacional de las Personas Sordas, pues se tienen muchos pendientes con este sector de la población, sobre todo para que haya una verdadera inclusión en México.
Mientras que en Michoacán estamos todavía en pañales en el establecimiento de políticas públicas que atiendan cabalmente a nuestros sordos.
En la entidad no tenemos una verdadera accesibilidad en las instituciones gubernamentales, lamentablemente solamente este concepto se usa en los discursos, pero en los hechos vivimos con muchas barreras y discriminación.
Además, hay mucha simulación en el trabajo gubernamental. Citando un ejemplo, en el ámbito educativo no contamos con los ajustes razonables en los niveles medio superior y superior para poder acceder a una educación inclusiva real.
Y eso hace que nos cueste el doble de trabajo, pues primero tenemos que acceder a la educación y posteriormente entender las clases, ello por falta de interpretes profesionales de la Lengua de Señas Mexicana. A lo que se suman temas laborales y de salud.
* Daniela Ayala Ochoa. Es promotora federal de la Lengua de Señas Mexicana y activista social en favor de los derechos de los sordos.
