La Página
Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- Con resultados que dejan mucho que desear, pero al precisar que será hasta el siguiente año cuando se haga el plan de trabajo, la titular de la Unidad de Evaluación y Control de la Auditoría Superior de Michoacán, Vanessa López Carrillo, tiene la esperanza de incrementar hasta 25 millones de pesos el presupuesto para el 2023.
Y al reconocer que la única auditoría de desempeño a la cuenta pública 2020 quedó cancelada porque los diputados no aprobaron una prórroga y no se cuenta con el personal necesario, quien hoy fue apoyada por el equipo de comunicación del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GGPT), sostuvo que no cuenta con los recursos humanos y materiales para atender la dependencia.
Precisó que este año se destinaron 15.5 millones de pesos. Sin embargo, justificó que su llegada se dio en mayo pasado y que el recuso financiero y las acciones ya estaban etiquetadas y distribuidas durante el año, a fin de que ella no tuviera manera de “generar un plan de trabajo”.
Por lo que expuso que está en búsqueda de incrementar el personal, el cual dijo, hoy es entre 35 a 40 empleados, pero que únicamente se tienen 2 auditores y se requieren entre 7 y 10 para sacar el trabajo, además de que haya oficialías de partes para los dos turnos y notificadores.
Con esto, aseguró que la Unidad no cuenta con mobiliario ni equipo de cómputo suficiente, además de que el personal es insuficiente para el trabajo que se tiene que realizar, aunque únicamente destacó que se debe capacitar.
Asimismo, reconoció que son dos los trabajadores que no cuentan con el perfil para estar en la Unidad de Evaluación y Control de la Auditoría Superior de Michoacán, los cuales dijo, serán separados de su cargo.
Estos son, María de los Ángeles García, jefa de Investigaciones, y José Ignacio Guillén, técnico en el área, quienes la primera solo tiene el bachillerato terminado, y el segundo es nutriólogo. Estas personas fueron señaladas por el diputado Marco Polo Aguirre Chávez.
