Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.-“¡Ey Bedolla, no somos infiltradas, somos feministas y estamos enojadas!” Con ese grito de aclaración dio inicio la marcha 8m, donde miles de damas hicieron acto de presencia para exigir un alto a la violencia a los derechos de las mujeres.
“Ni una más, ni una más, ni una asesinada más”,se escuchó sobre Acueducto y la Antigua Calle Real, seguido de: “Señor, señora, no sea indiferente, se mata a las mujeres en la cara de la gente”.
“Alerta, alerta” se coreó en exigencia de no más asesinatos de mujeres y niñas, no más feminicidios.
Con los Provida no hubo más; los colectivos feministas pasaron de largo en las Iglesias, mientras que los creyentes oraron.
“Hay que abortar, hay que abortar, hay que abortar éste sistema patriarcal”; “La que no brinque es macho, la que no brinque es macho; y, “Somos malas, podemos ser peores”, se escuchó durante el paso.
Los cristalazos y pintas no se hicieron esperar, el bloque separatista, mejor conocido como negro, se hizo presente. El Congreso del Estado y Palacio de Gobierno fueron los más golpeados por las acciones, toda vez que es ahí donde la violencia es mayor a las mujeres.
Una marcha tranquila, pese a un disturbio que se generó con un negocio, desde el cual lanzaron gas lacrimógeno a las manifestantes, quienes se dispersaron mediante estampida. Caídas se registraron ante la desesperación de salir del primer cuadro capitalino; la calma llegó y el mitin se realizó en paz.
Cánticos y golpeteos a la puerta de la Palacio de Gobierno también llegaron. La marcha terminó pasadas las 20:30 horas, un evento cultural siguió.
