Por ELVIRA FERNÁNDEZ
Hay un tema en boca de todos, ahora mucho más con la pandemia que estamos viviendo y que desgraciadamente es más común en nuestros días, la depresión y ansiedad. En México se calcula que al menos el 3.3 % de los mexicanos la padecen y afecta más a mujeres que a los hombres.
Se dice que los constantes golpes emocionales, pueden minar nuestro estado de ánimo y salud mental. La palabra depresión, proviene del término latino depressio depressus que significa“abatido” o “derribado”. Es un trastorno emocional que hace que la persona se sienta triste y desganada, experimentando un malestar interior y dificultando sus interacciones con el entorno.
Mientras que la ansiedad, es la condición de una persona que experimenta conmoción, intranquilidad, nerviosismo o preocupación. En términos médicos, la ansiedad es el estado angustioso que puede aparecer junto a una neurosis u otro tipo de enfermedad y que no permite la relajación y el descanso del paciente.
Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Estos trastornos mentales comunes están en aumento en todo el mundo. En el periodo comprendido entre 1990 y 2013, el número de personas con depresión o ansiedad aumentó en cerca de un 50%, de 416 millones a 615 millones.
Lo que representa al 10% de la población mundial. Estos trastornos representan un 30% de la carga mundial de enfermedad no mortal. La OMS estima que durante las emergencias 1 de cada 5 personas se ve afectada por la depresión y la ansiedad.
Se considera el inicio de un cuadro depresivo cuando alguno de estos síntomas se manifiesta por más un periodo de dos semanas. También es observable un cambio y deterioro de las relaciones laborales y familiares. Siempre y cuando estos síntomas no sean producto del uso de medicamentos o de sustancias tóxicas.
Síntomas de la depresión:
- Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día, o durante varios días.
- Disminución del interés para hacer actividades la mayor parte del día.
- Disminución o aumento del apetito.
- Insomnio (falta de sueño) o hipersomnio (dificultad para despertar)
- Agitación o enlentecimiento psicomotores, esto se refleja en los procesos mentales o del habla.
- Disminución de la capacidad para concentrarse , indecisión y fatiga
- Pensamientos recurrentes de muerte e ideación suicida, este aspecto incluye tentativas de suicidios o planes específicos para suicidarse.
Síntomas de la ansiedad:
- Taquicardia, opresión en el pecho, falta de aire, temblores, sudoración, molestias digestivas, náuseas, vómitos, “nudo” en el estómago.
- Inquietud, agobio, sensación de amenaza o peligro, ganas de huir o atacar, inseguridad, sensación de vacío, sensación de extrañeza.
- Estado de alerta e hipervigilancia, dificultad para estarse quieto y en reposo.
Según los expertos la mitad de las personas que ha sufrido un cuadro depresivo, vuelven a tener otros posteriormente y los que tienen un segundo corren el riesgo de mayor de presentar un tercero (el 70 %) y los que tienen un tercero, tendrán nuevos episodios (un 90%). Estos cuadros se agudizan cuando al atravesarlos se abusa de sustancias como el alcohol o drogas.
Claves para tratar la depresión y ansiedad
- Haz aquellas cosas que te hagan sentir mejor, al activarte incrementarás tu energía física y mental.
- Desarrolla tu autoestima, valora cada cosa que hagas y evita los pensamientos severos o críticos hacia tía misma.
- Si has identificado los pensamientos negativos, cámbialos por positivos y realistas.
- Desarrolla la asertividad y la capacidad para saber defenderte de manera no violenta frente a las presiones, exigencias o abusos de los demás.
- Desarrolla tu inteligencia emocional, aceptar y tolerar diferentes estados emocionales te dará ventaja sobre cualquier circunstancia de la vida.
- Aprende a relajarte.
- Establece objetivos y metas para tu vida.
- Afronta las situaciones y establece estrategias para solucionar conflictos.
Si crees que estás pasando por un periodo depresivo, busca ayuda inmediata, recuerda que todos tenemos derecho a vivir una vida feliz y plena. Una terapia te ayudará a encontrar herramientas para salir de ese estado. La clave y el éxito para conseguirlo es la actitud, y contar con un pensamiento positivo de saber que es posible. Recuerda que problemas y tribulaciones siempre tendremos en la vida pero el buen ánimo es lo que debemos procurar para salir de ellos.
Con información de:
http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs369/es/
http://www.milenio.com/tendencias/depresion-mexico-estadisticas-milenio-noticias_0_883111939.html
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Elvira Fernández. Es Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la UNAM. Ha trabajado en producción televisiva, ha colaborado como reportera, columnista y articulista para La Revista de El Universal, Milenio Diario. Ha sido coordinadora de comunicación en la Editorial Miguel Ángel Porrúa. Se desempeñó como articulista y editora para Nichos Sociales, en el portal Corazón de Mamás.
