La Página
Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- Durante poco más de 40 minutos, los integrantes de la LXXV Legislatura de Michoacán dejaron en claro su desconocimiento al procedimiento legislativo en el Pleno del Congreso Local.
Fue en el punto 23, del orden del día de la sesión ordinaria en el cual se tocó la propuesta del presupuesto del 2023 para el Legislativo.
Mociones aclaratorias, mociones suspensivas y lectura a un sinfín de artículos de la Ley Orgánica y de Procedimientos del Congreso del Estado fue lo que se vivió en esos 40 minutos.
Los protagonistas, los diputados Baltazar Gaona García en exigencia de la votación de moción aclarativa previo a la discusión del asunto, mientras que Víctor Manuel Manríquez González solicitó también una moción suspensiva para retornar la propuesta a la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) y el Comité de Administración y Control para que se diera a detalle la distribución de los recursos, partida por partida.
Daniela de los Santos Torres dio lectura a los artículos correspondientes y se dejó en claro que hasta que iniciará la discusión, se podría tomar en cuenta la moción.
Los morenistas no pidieron el uso de la voz, gritaron desde su curul para continuar el orden del día, principalmente y abanderados por Seyra Anahí Alemán Sierra, seguido por Juan Carlos Barragán Vélez, quien estuvo a un punto de “bronquearse” con Baltazar Gaona García, quienes la emoción exigieron a gritos el respeto desde su curul de golpe a golpe.
Oscar Escobar Ledesma se metió al quite y también pidió dar el procedimiento a las mociones presentadas, pero el diputado panista y ex compañero de bancada del primero, David Alejandro Cortés Mendoza, resaltó que este procedimiento es durante el debate y no antes.
Inclusive, la presidenta del Congreso, Julieta García Zepeda, perdió la institucionalidad y prefería darle la voz a los integrantes de la Cuarta Transformación que a lso que quedaron en la alianza, que una vez más se vio quebrantada por el Partido Acción Nacional (PAN), quienes fueron a favor del tema, pisoteando así la autonomía de la Auditoria Superior de Michoacán y no mediante el procedimiento legal.
Fueron 40 minutos de dimes y diretes que conllevó a que García Zepeda, entre su mala pronunciación, su tartamudeo y falta de conocimiento a la Ley Orgánica y de Procedimientos del Congreso del Estado, en espera de que le instruyera el personal de Servicios Parlamentarios, y a quienes no les hace caso, la sesión siguió con el debate.
