La Página
Por VERÓNICA TORRES MEDRANO
Morelia, Michoacán.- El articular el Sistema Nacional de Salud tuvo una gran complejidad para garantizar que todos los mexicanos accedan a los servicios médicos, enfatizó el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto.
El parar los trabajos para atender la pandemia de COVID-19, fue el reto que marcó la pauta para la ampliación del programa IMSS-Bienestar, donde todos las instituciones de salud abrieron sus servicios sin importar la derechohabiencia, lo que genera un modelo.
Tan solo en Michoacán, indicó, se han atendido a 8 mil 226 personas de manera no ambulatoria y hospitalaria. Además, de contar con 346 hospitalizaciones, hoy hay 31.
La atención a la población, empresarios que pusieron de su parte para seguir con servicios básicos, la vacunación y todo lo que se ha hecho en la pandemia, tendrá que reflejarse en la ampliación del programa IMSS-Bienestar.
Y es que durante la firma del acuerdo marco para la ampliación del programa IMSS-Bienestar, indicó, los servicios de salud deben romper con el neoliberalismo y adaptarse a los cambios que hoy se presentan.
“Si no cambiamos a un modelo preventivo, no habrá capacidad de atención en un futuro, eso nos ha enseñado la pandemia”, refirió al precisar que el fortalecer le primer nivel de atención, permitirá que haya mayor atención.
Asimismo, dejó en claro que no se privatizarán los servicios médicos, sino que serán gratuitos para que toda la población sin seguridad social puedan acceder a los mismos.
Fortalecer la infraestructura, contar con el recurso humano necesario, la regularización de los trabajadores y el abasto de medicamentos, insumos y materiales de curación son los ejes rectores del programa.
