Por MAFER GUILLAUMÍN*
¿Sabías que el origen del pozole es un poco turbio? ¿Alguna vez pensaste que el pozole era hecho con humanos? ¡Sí, leíste bien, con humanos! Este platillo es una preparación de origen prehispánico, durante la celebración en honor a Tonatiuh, Moctezuma recibía un plato de pozole con el muslo de algún prisionero que fue sacrificado.
Fue hasta que llegó Nuño Beltrán de Guzmán y vio la olla pozolera que decidió tirarla y ordenar a los tonaltecos a no volver a consumir más carne humana. En este momento los españoles deciden traer más cerdos a México, haciendo que su carne hasta la fecha sea de las más consumidas en el país.
La forma de elaboración que hasta la fecha se utiliza data del siglo XVIII, con el tiempo se han ido haciendo variaciones y modificaciones dependiendo la región en la que sea preparado. Y hoy es uno de los platillos más representativos de nuestra cocina mexicana.
Existen tres tipos de pozole: Verde, blanco y rojo. Este platillo, se acompaña con lechuga picada, cebolla picada, orégano, hojuelas de chile, salsa picante, rábanos rebanados, jugo de limón y tostadas. En algunos lugares de la República Mexicana se coloca crema en la mesa y se unta en la tostada y se come mientras saboreas el caldo, delicioso ¿No?
Originalmente es un platillo que se prepara con cerdo, algunas variantes es hacerlo con pollo o con maciza de res, también existe la versión vegetariana que contiene hongos en lugar de carne. Es un platillo que fue declarado como completo, ya que contiene ingredientes de varios grupos de alimentos, dependiendo la carne que utilices puede ser una comida que puedes disfrutar sin remordimientos.
Antes el pozole era servido en los funerales, ya que es un alimento que se puede preparar en grandes cantidades: Hoy lo consumimos en fechas como el 15 de septiembre, navidad, año nuevo, cuando tenemos antojo, realmente no hay una fecha para poder disfrutar de un delicioso pozole.
Las recetas más populares son las de Jalisco, Guerrero y Michoacán. En Guerrero lo acompañan con trocitos de chicharrón y hasta le agregan huevo cocido; en Jalisco no sólo tienen pozole de cerdo, también hay de camarón y lo acompañan de la misma forma; en Michoacán el pozole rojo de Pátzcuaro incluye granos de maíz rojo y es con carne de cerdo.
En lo personal me fascina el pozole verde, realmente disfruto un buen plato pozolero con todos los aditamentos necesarios para acompañarlo, desde unas ricas tostadas hasta una cerveza muy fría.
Llegó Septiembre y se declara abierta la temporada de pozole, es momento de disfrutarlo con tu familia y tus amigos ¿A ti cual es el que más te gusta?
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* Mafer Guillaumin. Es licenciada en Gastronomía por la Universidad Latina de América. Tiene un negocio llamado “Vianda Banquetes y Barra”, dedicado a la banquetería y la organización de eventos sociales.
Para contacto directo: Instagram @mafguillauminchef
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