La Página/Redacción
Morelia, Michoacán.- Alrededor de 70 mil visitantes espera San Juan Nuevo este mes con motivo de las Fiestas Patronales del Señor de los Milagros, a celebrarse el próximo 14 de Septiembre.
Así lo dio a conocer el Presidente Municipal, Vicente Guerrero Ruiz en conferencia de prensa celebrada en la Secretaría de Turismo del Estado, donde también invitaron a los michoacanos y público en general a conocer la variada oferta de atractivos con que cuenta el municipio, tanto en el ámbito de las bellezas naturales, como en sus tradiciones, historia, gastronomía y otros aspectos de la cultura.
El síndico Francisco Gutiérrez Gómez, la regidora Angélica Remigia González y el representante del Comité Organizador de las Fiestas Patronales, Juan Chávez Aguilar, presentaron también los diversos eventos que ofrece el municipio durante el mes de septiembre.
Puntualizaron que en la actualidad el turismo es la tercera fuente de ingresos para el municipio, antecedida solo por la actividad forestal y la producción aguacatera.
Por otra parte, informaron que la imagen religiosa conocida como El Señor de los Milagros es venerada por San Juan desde 1579 y durante el éxodo de la población a causa de la erupción del Volcán Paricutín, fue rescatada del viejo templo que quedó sepultado entre la lava.
En San Juan nació un dicho en torno a las causas imposibles, que reza “lo que pides no se logrará aunque entres a San Juan Bailando”. De manera indirecta se subraya así la reconocida capacidad milagrosa de su Cristo: el Señor de los Milagros.
Si bien el Santo Patrono de San Juan es justamente San Juan Bautista, en la época colonial se esparció la fama de una imagen de Cristo perteneciente al mismo templo. Se decía que un desconocido llegado de fuera lo dejó en el templo de San Juan Parangaricutiro y que era muy milagroso.
Todos lo creían menos el cacique del lugar. Pero un día su hijo enfermó gravemente y al no encontrar cura alguna, volvió sus ojos al Santo y le prometió que si salvaba a su hijo le bailaría en agradecimiento igual que según la Biblia bailaba el Rey David para venerar a Dios. El niño se curó y el cacique cumplió su palabra.
La comunidad fue testigo del suceso y fue así como cobró fuerza esta forma de veneración, petición de favores y agradecimiento por los mismos.
En San Juan todo el año se baila para solicitar favores, pero el 14 de septiembre en particular esta devoción cobra fuerza. Después del día 14 se realiza la “octava” o “fiesta chica” una celebración a los ocho días de la “Fiesta Grande”.