La Página
Por ANA MARIA CANO
Morelia, Michoacán.-Es muy intenso en cuanto al desarrollo de la verdadera política se refiere. Desde niño tienen una vocación de servicio real, no de apariencia. Ernesto Núñez Aguilar es un moreliano orgulloso, que presume su ciudad con cualquiera. Es tu tierra, misma que le ha enseñado a luchar por los sueños y nunca abandonarlos.
De ahí que desde los 17 años tuvo la oportunidad de trabajar en la administración pública. Actualmente es diputado local por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), en la 75 Legislatura del Congreso del Estado, ve a su familia como el motor de vida, por lo que la convivencia con ella es fundamental. Desde los 17 años se ha dedicado a la administración pública.
Entrevistado en el programa “Conexión”, que conduce el periodista Víctor Armando López, y que se transmite en vivo en Facebook a través de las direcciones @LaPágina y @cuartopodermich, el diputado de 42 años de edad, es abogado de profesión, tiene una maestría en Gobierno y Políticas Públicas, cuenta con ocho diplomados en diferentes materias, uno de ellos en Derecho Parlamentario.
Dice tener la gran fortuna de contar a su lado con una gran esposa y dos niñas pequeñas, quienes son su motor de vida, todas ellas el motivo de una inacabable sonrisa.
Nació en la colonia Gertrudis Bocanegra, misma que marcó su niñez. Es hijo de un maestro destacado de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) –Elio Núñez Rueda-. A su madre la admira mucho al igual que a sus tres hermanas.
De joven, recuerda, fue inquieto pero no una mala persona, por lo que nunca dañó a nadie. Siempre con la vocación de poder servir pues tiene el ejemplo de sus padres quienes son personas con una gran disposición de apoyar a su prójimo.
“Mi madre tiene una vocación de servicio muy genuina, siempre estaba viendo cómo ayudar a los demás. Fui muy chiqueado por mis padres y mis hermanas, rodeado siempre de mucho amor y cariño, fui un niño y joven muy inquieto, travieso pero nunca una mala persona”.
Estudió el bachillerato en la Preparatoria 1 de la UMSNH donde conoció un mundo diferente e hizo grandes amigos. De ahí se va a estudiar su carrera a la Universidad Latina de América, pues en ese tiempo había constantes huelgas y tomas en la Universidad Michoacana.
Acepta haber sido un mal estudiante porque llegó a un mundo nuevo con libertades, mismas que se reflejaban con irse con los amigos a todas partes, pero al final de cuentas terminó la preparatoria.
Al iniciar sus estudios profesionales decidió ser un alumno destacado y con buen promedio. Incluso, fue jefe de grupo y luego, presidente de la Asociación de Alumnos de Derecho. Y pasó a ser el organizador de todos los eventos internos de la Universidad, perseverando siempre las ganas de hacer política en grupos juveniles. Logró traer congresos de talla nacional, lo que le permitió irse identificando con otros compañeros a quienes también les interesaba la política.
“Yo decía quiero ser un abogado que aproveche las clases, los estudios, y por eso tomé la decisión de estudiar en esa universidad, pero en mi familia todos son nicolaítas, pero la vida me llevó por diferentes circunstancias”.
Compartió una anécdota que vivió en la universidad: Un día no se preparó para hacer un examen, cuenta le pidió a Dios lo ayudara a que no fuera el maestro o que pasara el examen. Le solicitó a su profesor tiempo para hacerlo en otro día, pero éste no aceptó, y estando en pleno examen sonó una alarma de bomba, su maestro creyó él había sido el provocador, sin embargo, pudieron dar con el responsable.
Es un apasionado de la política, le gusta el servicio público lo cual es algo que le llamó la atención desde pequeño, y quienes lo conocen saben que tiene realmente una vocación de servicio genuina.
“Mi vocación por servicio es de verdad, no es de esa que es solo para las poses, lo que suele pasar mucho en la clase política. Me gusta mucho lo que hago, he tenido la fortuna de que me vaya bien dentro de la política, misma que me ha apasionado mucho desde muy chico, ya que la he vivido a través del seno familiar”.
Estudió Derecho porque su pasión es la política, desde niño siempre quiso dedicarse a ello, nunca titubeó en ello, cuando le preguntaban qué quería ser de grande, en lugar de decir bombero, decía que sería senador de la República.
Ser diputado local, señala, fue un primer sueño, y la vida le ha dado la oportunidad serlo tanto local como federal, recuerda también que cuando pasaba junto al Congreso del Estado, siempre dijo que ahí tendría que estar algún día.
“Yo soy muy intenso en el tema de la política, soy un apasionado de la figura de Colosio de sus sueños y aspiraciones”.
A estas alturas, ha tenido varias responsabilidades importantes, donde destacan el haber sido secretario particular del ex presidente municipal Fausto Vallejo; cuando tenía 27 años fue secretario de Administración, también secretario particular del gobernador electo, posteriormente diputado federal y también local.
Su partido de origen fue el PRI, sin embargo, se afilió al PVEM donde desde hace cuatro años dirige sus riendas. Lo tomó como un “partido chico” el cual ha ido creciendo día a día, así como él sigue aprendiendo la mejor manera de hacer política.
“Estoy contento de todo el contexto de mi vida y con muchos sueños y objetivos, me gusta soñar soy idealista, me apasiona el quehacer político por lo que estudié diversos diplomados que me fueron adentrando a ello, desde los 17 años estuve en el DIF estatal, luego me invitaron a trabajar a Pensiones Civiles del Gobierno del Estado y luego ya en el Ayuntamiento”.
Se dedicó por un tiempo a la vida empresarial, la cual, dice, se dio cuenta que no le gustaba mucho, y regresa a la administración pública en varios puestos dentro del Gobierno Estatal.
Su primer día como diputado federal, que fue la primera contienda que ganó, recuerda que al ingresar al Congreso de la Unión, lo acompañó como su principal cimiento su esposa, tenía una alegría y orgullo enorme.
“Fue padrísima la sensación porque era un recinto que sólo veía por la televisión, y el estar ahí y saber que ya era uno de los actores fue la satisfacción de la realización personal. Pero lo que más recuerdo es cuando me tocó subir a la tribuna por primera vez, eran unos nervios terribles, temblaba, pero también era emoción, sin lugar a dudas fue un gran momento”.
Sobre sus iniciativas que ha presentado en ambos Congresos dice que tanto le han aprobado algunas así como otras han sido rechazadas.
Su vocación de servicio le da la oportunidad de que cuando se puede ayudar a la gente lo hace.
Su mensaje para los jóvenes políticos es que luchen por sus sueños, que lleguen a ser políticos completos, que sean multifacéticos ya que cada día existe más competencia.
“Es importante que se den a conocer por muchos frentes y sobre todo de no decir mentiras se debe abarcar mucho en el tema del medio ambiente y del animal”.
Un día normal en su día es llevar a su hija al preescolar, hacer ejercicio, irse a sus actividades políticas, atender a gente de su partido, proyectando los días de trabajo en los diversos comités, ve la agenda política del Congreso del Estado, come los lunes con su familia paterna y trata de estar lo más cercano con sus hijas.
“Sábados y domingos trato de estar al cien por ciento con mis hijas, son días muy familiares, de estar con la familia, con mis princesas, ellas son mi vida, me encanta estar con ellas”.
Núñez Aguilar dice que Michoacán necesita una llave que le dé seguridad, que es necesario tener un Michoacán seguro, ya que si el estado tiene seguridad lo conlleva a tener otras oportunidades tanto económicas como sociales.
Lo que más le duele a los michoacanos, dijo, son los problemas de inseguridad que se viven a diario, por lo que la seguridad es lo que más se quiere y se requiere.
